Según la Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Trabajo de EE. UU., la inflación se disparó a su nivel máximo de los últimos 40 años a principios de 2022, dado que los precios al consumidor aumentaron un 7,5% de enero de 2021 a enero de 2022. Como resultado, el costo promedio de las necesidades básicas que las personas necesitan para vivir, o el costo de vida, ha aumentado, lo que reduce el poder adquisitivo de las familias de todo el país. Pero ¿qué es la inflación y qué la produce?
¿Qué es la inflación?
La inflación es la tasa de aumento de los precios de los bienes de consumo, los servicios y el costo de vida. Este importante acontecimiento financiero debe tomarse en cuenta en los planes de ganancias, gastos y ahorros de cada año.
La inflación se puede determinar por varios medios, pero el más común para los EE. UU. es el Índice de Precios al Consumidor (IPC), que mide el cambio promedio en los precios que los consumidores urbanos pagan por una canasta básica de bienes y servicios de consumo.
El IPC toma en cuenta los costos de estos bienes y servicios de consumo en varias ciudades y suburbios de Estados Unidos para identificar las tendencias de precios en la economía.
Factores que producen la inflación
Varios factores producen la inflación.
La tasa de inflación comienza a aumentar cuando las personas están dispuestas a y son capaces de pagar un precio más alto por los bienes. Esto produce un aumento en los costos de producción de las materias primas y, en última instancia, un aumento de los precios. Esto suele no suceder de inmediato, sino durante un periodo de tiempo, en el que los cambios de precios pueden parecer poco relevantes al principio.
Los productos y servicios de necesidad o deseo son propensos a la inflación. La primera categoría incluye elementos esenciales, tales como alimentos, bienes raíces, servicios públicos y atención médica, mientras que la última podría incluir artículos de lujo, tales como joyas y automóviles.
Otros factores incluyen:
Inflación de demanda
Ocurre cuando hay un rápido crecimiento en la demanda agregada de productos y servicios de consumo, lo que produce un aumento en sus precios. Esto suele ser el resultado de una economía fuerte, dado que los costos aumentan porque las empresas deben aumentar su oferta para satisfacer la nueva demanda.
Por esta razón, y aunque parezca extraño, un fuerte crecimiento económico puede provocar problemas si produce una alta inflación. Aunque las personas con salarios más altos podrían adaptarse, esto se les hace difícil a las personas con ingresos fijos.
Inflación de costos
Es provocada por el aumento de los costos laborales y de fabricación, que da lugar a precios elevados de bienes y servicios de consumo. Los costos de producción podrían incluir salarios y materias primas. El aumento de los costos de manufactura conduce a una caída en la oferta de bienes y servicios, mientras que la demanda se mantiene estable. Los consumidores son los que pagan por los costos de manufactura más altos al pagar precios más altos por el producto o servicio final.
Inflación del mercado inmobiliario
Es el resultado de una mayor demanda de viviendas en una economía en auge. Al igual que el mercado de valores, la volatilidad ha afectado el mercado inmobiliario recientemente. A medida que más consumidores persiguen la equidad en forma de propiedad de vivienda, los compradores pueden esperar un aumento posterior en los precios de las viviendas. Esto también aplica a los productos auxiliares relacionados con la construcción, como la madera, el acero, etc.
La Reserva Federal de los Estados Unidos y otros bancos centrales y sus economistas monitorean la inflación. La Reserva Federal mantiene una inflación objetivo de 2%, por lo que observa de cerca el aumento de precios y la tasa de aumento para ajustar la política monetaria del país para contrarrestar la inflación.
En otras palabras, los economistas observan cuidadosamente el cambio porcentual de los precios y ajustan las tasas para tratar de estabilizar los precios. Sin embargo, no pueden establecer los precios; solo esperar que los cambios de las tasas lo terminen logrando en consecuencia.
La inflación es preocupante para los consumidores, porque el dinero que ganan y ahorran disminuye su valor con el tiempo. Como resultado, las personas pierden poder adquisitivo.
¿Por qué está aumentando la inflación?
Los grandes acontecimientos mundiales provocan la inflación. Por ejemplo, la pandemia de COVID-19 desencadenó un aumento inflacionario errático. La demanda de los consumidores bajó mucho durante la fase inicial de la pandemia. Pero ha aumentado desde entonces, particularmente porque más personas han comprado en línea.
Esta mayor demanda va acompañada de una crisis en la cadena de suministro, dado que los almacenes estaban sobrecargados y los puertos de envío estaban bloqueados, lo que impedía que se entregaran los productos. Esto significó escasez en los estantes.
Además, los precios de las viviendas de venta y alquiler han aumentado mucho. Muchas empresas aprovecharon la pandemia para disfrutar de los beneficios del aumento del consumismo y el gasto de los consumidores.
El gobierno federal impulsó la economía estadounidense con enormes paquetes de estímulo, que equivalían a miles de millones de dólares, a familias y pequeñas empresas que calificaran durante la pandemia. Posteriormente, la Reserva Federal redujo sus tasas de interés y compró bonos.
¿Cuáles son los efectos de la inflación?
La inflación afecta tanto los precios al consumidor como el costo de vida. A medida que aumenta la inflación, también lo hacen los precios de los productos y servicios de consumo, tales como comestibles, servicios públicos, atención médica y bienes raíces. El aumento de los precios de los bienes y servicios podría reducir el gasto de los consumidores, porque muchas familias destinan gran parte de sus ingresos familiares a estos elementos necesarios.
Uno de los indicadores de la inflación es su impacto general en los salarios. Lamentablemente, mientras muchas industrias como la hospitalidad están recuperándose lenta pero constantemente luego de las pérdidas sufridas por la pandemia, los salarios han tardado en seguir el ritmo de la inflación.
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